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Los primeros datos demográficos
de que tengo noticia pertenecen al año 1920. En esa fecha
Riofrío estaba formado por 98 edificios y
298 habitantes. Esta población suponía el 11,2 % de
la población total del Municipio, formado por trece pueblos (uno
ha desaparecido bajo las aguas del paa tano de Villameca) y con una población
total de 2647 habitantes.
A partir de aquí la demografía experimenta
un ascenso continuo, salvo en los años de la guerra en los que suponemos
que la población se estancaría un poco. La explosión
demográfica más fuerte se produos en 1962, en que la población
de 1920 casi se había duplicado: el 31 de diciembre de 1962 la población
total de Riofrío era de 585 habitantes 282 hombres y 303 mujeres.
Respecto al año anterior hubo veinte altas y siete bajas en la población.
Ese mismo año la población total del Municipio era de 2882
habitantes, 1391 varones y 1491 mujeres. La población de Riofrío
suponía entonces el 20,3 %.
En este momento se producen una serie de circunstancias,
tanto a nivel nacional como local, que provocan el principio de la decadencia
poblacional. A nivel nacional ocurre el fenómeno de la industrialización
del país con su correspondiente demanda de mano de obra. Por
otra partes los medios de comunicación social y de transporte abren
la comunidad al mundo exterior.
A nivel local, se cultivaba en ese momento toda
la superficie territorial del pueblos pero la producción resultaba
insuficiente para vivir tantas personas. En esta situación
varias familias se ven obligadas a abandonar la comunidad en busca de nuevas
perspectivas para su vida. Esta emigración se orienta en tres
direcciones fundamentalmente: 9 familias se instalan en pueblos de la montaña
de León, haciéndose cargo de la hacienda de grandes propietarios,
Algunas de estas familias, concretamente tres, después de varios
años han vuelto al pueblo; otras dos se han instalado definitivamente
en la ciudad. Un segundo punto de emigración lo constituía
la ciudad, a la cual se dirigieron tres familias empleadas en la construcción.
Al extranjero también se dirigen bastantes, 2 familias completas
y bastantes jóvenes.
El descenso mayor se produce en el año 1970,
en el que de 506 habitantes que había a finales de 1969 se pasa
a 422 a finales del año siguiente. El alto coste de la vida
y la baja productividad del campos unido a la explotación que sobre
él se ejerce desde arriba y a la influencia exterior, hace que los
jóvenes busquen nuevas y mejores perspectivas que las que les ofrece
la agricultura en ese momento.
La mecanización del campo también
ha contribuido grandemente a la emígración de la comunidad.
La llegada de los tractores al pueblo suple cantidad de mano de obra joven,
que por otra parte, prefieren dedicarse a un trabajo remunerado en la ciudad
antes que seguir en el pueblo. Esta inmigración de los jóvenes
se produce hacia zonas industriales como Barcelona y Bilbao sobre todo.
Esta marcha ha sido y sigue siendo ininterrumpida
a lo largo de estos últimos años. La población
total el 31 de diciembre de 1975 era de 378 habitantes la mayoría
de los cuales superan los 30 años de edad. Otro dato significativo
en el descenso poblacional lo marca la cantidad de niños existente
en edad escolar. Mientras que en 1960 el número de éstos
era de 200, 94 niños y 106 niñas, a finales de 1976 el total
de niños y niñas en edad escolar era únicamente de
70.
El decrecimiento tan rápido de la población
-en catorce años ha disminuido en un 34%- será uno de los
factores que incidirán decisivamente en la desaparición de
la cultura tradicional de esta comunidad. |